Puede que a estas alturas estés agotado de enviar adjunto tu CV, y puede que además, hayas decidido buscar en google un «modelo de carta de presentación» , copiarlo y pegarlo en tu email…
Bien, es momento de que te tomes un respiro, apagues el ordenador y continúes mañana.¿Porqué te decimos ésto? Sencillo.
¿Crees que su contenido es atractivo? ¿Llama la atención? ¿Genera una llamada a la acción? ¿Te diferencia del resto de los candidatos? y sobretodo… ¿En qué siglo se escribieron?
Nuestro consejo es, sé tu mismo.
- Se original
- Diferente
- Genera expectación
- Véndete; vende tu marca, tu trabajo y tu experiencia
- Demuestra lo que vales.
Tomate un tiempo, piensa, escribe en un papel, reescribe, léelo en alto, escribe un par de versiones (una más agresiva y otra más formal), prueba suerte, testa cuál funciona mejor, no te cortes, sigue probando y nunca nunca lo des todo por perdido!!
Y mientras, nosotros vamos a predicar con el ejemplo a ver si le damos forma a nuestra autocandidatura 🙂